Subject: el inca valero

que triste final para un gran boxeador....

que final tan feliz para un homicida

que merecido final para un mmawebo

si enrealidad es verdad eso. .pero es lamentable del lado deportivo era un mostruo en el ring
con el increible record de 18 nocaust seguidos antes de que terminara el primer asalto..

asi termina la vida de toda persona que consuma drogas.......

era un mostruo en el ring

y fuera del ring se convirtio en un monstro... un homicida...

y no consumia drogas...


era alcoholico

si era adicto a la cocaina.. y marihuana el mismo lo confeso hace 2 semanas...
de hecho ayer le encontraron varios envoltorios en su camioneta.

aja y no le hacian pruebas antidopaje o que

entonces esa cantidad de knockouts son una ilusion...

si alguna vez te llegas a caer a coñazo con un bicho q wela cocaina

asi le des con un bate en el coco no lo va a sentir

En cuanto a eso parece que no.. y mas aun en su ultima pelea aca en venezuela la cual gano !! tambien por KO, el presidente de la federacion de boxeo en venezuela dijo con su cara muy limpia que no le habian hecho las pruebas antidoping y que habian cometido un ¨Error ¨..

Tambie el mismo inca se habia negado a que se le realisaran las pruebas..

...cuando el rio suena es porque piedras trae...18 KO en el 1er round pero queda sembrada la duda si fueron lisitas..

oerikiado como maradona cual kierahace milagros XD y se cree dios

ojala y lo vieran violado y descuartizado por la felicidad de todos

la verdad es que ni el tema merece estar.

Informes psiquiátricos revelaron que Valero consumía drogas desde los 11 años. Estuvo preso 40 veces.


El ex campeón mundial de boxeo, Edwin “El Inca” Valero, se suicidó ayer en la madrugada, a menos de 24 horas de haber degollado a su esposa. “La muerte de Jennifer y ‘El Inca’ fueron planeadas por él”, aseguraron los familiares de la muchacha.

La relación tormentosa que se rumoraba existía entre el boxeador y Jennifer Viera Finol, de 24 años.La relación tormentosa que se rumoraba existía entre el boxeador y Jennifer Viera Finol, de 24 años, quedó evidenciada cuando “El Inca” le cortó el cuello en una habitación de un hotel en Valencia. El hombre confesó su crimen y horas después de ser detenido apareció en una celda ahorcado con su pantalón.

“Los funcionarios de Policarabobo encargados de custodiar a Valero serán investigados”, aseguró el comisario Wilmer Flores Trosel, director del Cicpc.

La tragedia desatada por una combinación de amor, golpes y drogas reveló la historia oculta de la figura deportiva: “Edwin lo tenía todo planificado. Mi sobrina y él, habían dicho que si pasaba algo, que los niños se quedarían con nosotros”.

PANORAMA obtuvo de forma exclusiva copias del informe psiquiátrico de “El Inca” Valero, instruido al Cicpc-Mérida, por el departamento de ciencias forense de ese cuerpo investigativo.

El documento, revela que a Edwin, se le “refieren 40 detenciones por diversas causas, robos y riñas”. El significativo expediente cuenta, de forma resumida, la verdadera historia de Edwin Valero: desde el niño, el vigiense que se obsesionaba por el boxeo y dormía en las bancas del gimnasio, hasta ‘El Inca’, que golpeaba a Carolina y a su propia madre.

Edwin, “vivió bajo situación de calle desde inicios de la adolescencia, consumió alcohol desde los 9 años.Edwin, “vivió bajo situación de calle desde inicios de la adolescencia, consumió alcohol desde los 9 años, y drogas desde los 11”.

“Esperamos los resultados del informe forense que revele los detalles de la muerte del boxeador para entregar el cadáver a los familiares”, recalcó el comisario Flores Trosel, mientras los hermanos de Edwin indicaban que no tenían recursos para trasladar los restos del homicida-suicida hasta El Vigía.

La madre de Edwin, que vive en una humilde vivienda no lograba pronunciar palabra, sus hija, Saida Moreno Vivas, dijo a PANORAMA, “no lo quieren velar en una funeraria, porque ayer (el domingo) todos hablaban mal de él, por lo que hizo. Mi mamá, no tuvo el valor para buscarlo en Valencia”.

Los parientes de Jennifer confirmaron que el cadáver de ‘El Inca’ Valero tuvo que ser reconocido por su suegra, Mary Finol y madre de su víctima, quien para el momento, estaba en Valencia, esperando que le entregaran el cuerpo de su hija.

Él quería lo mejor para todos, desde que era un niño pequeñito, esa era la aspiración que él tenía. Sus sueños eran ser lo que él fue.

Él se escapaba para ir allá al gimnasio, la mamá le decía ‘no vaya, que eso es muy feo’, pero él repetía ‘no mamá, a mí me gusta eso’ y se escapaba. Lo buscaba mi hermana, pero él le decía ‘no mami, déjeme aquí, yo quiero estar aquí, a mí me gusta este deporte’, repetía Ana Julia Vivas, tía de “El Inca”.

“Nos reunimos hace como tres semanas con él, pero fue horrible. Él llegó aquí, estaba mal, sólo nos insultaba. Esa fue la última vez que lo vimos así. A mamá siempre la llamaba, porque él pensaba que nosotros le queríamos hacer daño, que nosotros lo queríamos matar, y le decía a mi mamá, que nosotros teníamos que pagar eso. Su adicción le hizo alucinar cosas”, comentó Saida Moreno, hermana de Valero.

QEPD. De pana muy triste la historia de ese chamo, se jodió la vida ely a quienes quería. Lo que cuentan de que queria lo mejor para todos es cierto en gran parte (porque por otras les dio sufrimiento) al chamo bajaba plata para gimnasios alla en Merida, lastima que no controlo su addicción, y terminó siendo otro idolo de barro, muchos en Venezuela no hacen mas que maldecirlo, algunos por lo que llevaba en su pecho, otros por lo feo que le hizo a su propia esposa, pero muchos ignoran las razones que le hizo tocar fondo, yo aun consternado por lo que hizo espero que esas dos almas logren descanso eterno, porque quienes entndemos de ese tema sabemos que les va a costar desprenderse del mundo terrenal.

Horas antes de quitarse la vida en una celda de Policarabobo, el campeón venezolano, lamentó que lo hubieran dejado solo ante su situación. En una entrevista concedida a El Nacional reconoció que estaba drogado cuando se produjo la muerte de su esposa. Al preguntarle por su futuro inmediato, expresó temores por primera vez. “Ahora sí que me fregué. Ya no podré volver a ver a mi hija”, dijo.

En el lugar más recóndito de la Comandancia General de la Policía de Carabobo, el campeón mundial de peso ligero Edwin Valero comenzó a deprimirse.

El efecto de la cocaína mezclada con el alcohol iba desapareciendo, y en su lugar quedaba la resaca. Una sensación que él ya conoce.

Es un detenido de cuidado, advirtieron los funcionarios que lo custodiaban. El hombre asomó los brazos por los barrotes de la celda que tiene para él solo. Ya le quitaron la chaqueta vinotinto que tenía en la mañana, cuando llegó. Como no llevaba franela, podían verse algunos de los tatuajes que solía exhibir en el ring, cuando la fortuna le sonreía. Religión y patriotismo están grabados en su pecho y brazos.

En la celda contigua, el líder de los detenidos golpeó la puerta, para llamar la atención: “Edwin, mi amor, aquí te tengo un juguito para cuando quieras”. Valero no se inmutó. Por el contrario, sus primeras palabras fueron una petición. El boxeador no quería privilegios. Deseaba que lo pusieran con los demás reos.

“Me siento solo. Necesito hablar con alguien”, expresó.

Viaje interrumpido

La memoria del boxeador todavía no se ha recuperado. Hay numerosas lagunas y contradicciones en su relato. Recordó haber salido el sábado de El Vigía, estado Mérida, con su esposa, Jennifer Carolina Viera Finol, de 24 años de edad.

“Yo iba para Cuba a un tratamiento de rehabilitación. Pero no tenía pasaporte, lo perdí. Así que íbamos a estacionarnos en La Guaira hasta que me lo dieran. El vuelo iba a ser ayer”, explicó.

Valero conducía un Toyota Land Cruiser azul, placas IAP900. Decía que la relación con su cónyuge había mejorado. Que ella quería ayudarlo a que se recuperara de su adicción a los psicotrópicos.

“Nos fuimos por la vía del páramo. Ya desde entonces yo iba tomando vodka. Bebía y bebía. De repente, me doy cuenta de que alguien me viene siguiendo. Eran como las 10:30 pm. Aceleré hasta que llegamos a un peaje y le dije a un sargento que querían robarnos o secuestrarnos. No recuerdo bien cuál peaje fue. Luego de un rato allí, el hombre nos dijo que fuéramos al hotel Intercontinental. Vine a Valencia porque querían secuestrarme”, relató.

Valero dijo haber pagado en efectivo por la habitación.

Mientras hacía las gestiones, veía con recelo a la gente que estaba a su alrededor, en el lobby del hotel.“Había una mujer que estaba así como recostada, y veía fijamente a mi esposa. Otro señor también la saludó”, indicó.

Arriba, en la habitación 624, Valero ingirió más alcohol y alcaloide, hasta que perdió el sentido del tiempo y el espacio. Su relato se interrumpió allí, en la cama con su mujer. “Me acosté con ella, y cuando me levanté mi esposa ya estaba muerta”, manifestó.

Ensangrentado

Desde su celda, el boxeador recordó haber bajado al lobby del hotel. Allí habló con un empleado de seguridad, y le notificó lo que había sucedido en su habitación.

Valero, sin embargo, aún no sabe con certeza si él es responsable de la muerte de Viera.

Recordó que al despertarse él estaba impregnado de sangre, y que así bajó a notificarlo. No obstante, al preguntarle por su futuro inmediato, expresó temores por primera vez.

“Ahora sí que me fregué. Ya no podré volver a ver a mi hija”, dijo.

Cuando le preguntaron si deseaba que llamasen a alguien, el campeón de boxeo se mostró indiferente.

“Con mi familia no cuento en estos momentos. Creo que se enterarán de lo sucedido por la prensa. Me dicen que ya todo el mundo sabe de esto. Ahora, si puede, llame a mi manager, Segundo Lujano. El debería venir”, dijo.

El tiempo pasó, eran más de las 4:00 pm y su representante aún no llegaba. En la mente del boxeador se está armando una conspiración para incriminarlo por un crimen que él no admite.

En la otra celda, los prisioneros volvieron a golpear la puerta: “Valero, no nos importa. Eres el mejor”.

Bueno sucesos que pasan en todo el planeta, mala noticia :( inca iba ser noticia en el comercio americano boxistico

QDEP CAMPEON ASESINO!